Crítica de ‘Capitani’: La serie policial luxemburgués

El género policial es uno de los más populares tanto en cine como en televisión. El gigante del streaming lo sabe y ha traído a su plataforma una serie europea de 2019 con mucho potencial. En esta crítica de ‘Capitani’ te contamos más detalles (sin spoilers).

Una serie imperfecta con grandes aciertos

Capitani no replantea el género policial, tampoco tiene la calidad de producciones como Fargo, True Detective o The Killing. Sin embargo, su pareja protagonista tiene la fuerza para llevar el peso de la historia y su conflicto es capaz de mantener en tensión a los espectadores hasta el final. En otras palabras, aunque no quede grabada en la retina del público, su historia merece la pena.

La serie gira en torno a la muerte de una chica adolescente de un pueblo en Luxemburgo. La investigación estará a cargo de Capitani, un hombre inteligente y capaz, pero también un extraño para los lugareños; y de Elsa, una policía joven y competente.

Ambos forman un buen equipo: por sus habilidades como investigadores y por la calidad de sus actuaciones. El lugar donde se desarrollan los hechos, además de servir como ambiente, establece ciertas condiciones que harán más compleja la investigación. La mayoría de sus habitantes no son de ayuda para atar cabos o encontrar pistas de lo sucedido. De hecho, la verdad es casi un lujo, una extrañeza para un pueblo donde se esconden secretos importantes y donde se propagan rumores de todo tipo.

Pero lo que representa un obstáculo para la investigación, también supone una virtud para la narrativa. La historia construye el conflicto de forma paulatina y mantiene al público expectante hasta el final. No solo habrá necesidad de conocer al culpable, también las motivaciones y demás detalles del sujeto en cuestión.

Las respuestas llegan, pero…

La resolución del conflicto no es tan efectiva como la construcción del mismo. En otras palabras, Capitani luce mejor cuando plantea las preguntas que cuando revela las interrogantes. No porque las respuestas carezcan de sentido, pero sí del impacto narrativo y emocional que merece el relato.

Sus creadores se ocuparon más de sorprender y despistar a los espectadores, que de construir una historia redonda y potente de principio a fin. Por otro lado, algunos detalles son contradictorios o poco creíbles. Afortunadamente, estos no son vitales para la narrativa, pero tampoco pasan desapercibidos (detalles que no revelaremos para evitar spoilers, claro está, podemos hablar de ellos en los comentarios).

Otra temporada en camino

Cabe destacar que la serie también se vale de episodios cortos y de un ritmo bastante llevadero para mantener a los espectadores interesados hasta el final de la historia. Pero, a pesar de que el desenlace deja al descubierto la mayoría de las respuestas que necesitábamos, algunos eventos parecen inconclusos.

Es decir, necesitamos una segunda temporada para atar algunos cabos y para tener una sensación de satisfacción mayor. Temporada que, por suerte, está en camino. Sin embargo, lo contado puede ser suficientemente cautivador para algunos, pero también puede dejar con sensaciones encontradas a otros.

En fin, Capitani es una serie por encima del promedio, pero con herramientas suficientes para ser mejor de lo que resultó al final. Ojalá la segunda temporada nos regale nuevas satisfacciones…

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